Fragmentos Del Evangelio Según
Los Hebreos
(Citas en la literatura cristiana
primitiva)
San Irineo (+ h.202)
1. [Los ebionitas] utilizan
únicamente el evangelio que es según San Mateo y rechazan al apóstol Pablo,
llamándole apóstata de la Ley. (Adv. haeres. I 26,2)
2. Pues los ebionitas,
sirviéndose solamente del evangelio que es según San Mateo, se dejan persuadir
por él y no piensan rectamente del Señor. (Adv. haeres. III 11,7)
Clemente Alejandrino (+ ant.215)
3. Y como también está escrito en
el evangelio según los Hebreos: El que se admiró, reinará; y el que reinó,
descansará. (Strom. II 9)
4. Pues aquello puede equivaler a
esto: El que pide, no cejará hasta que encuentre. Y en encontrando, se llenará
de estupor; y en llenándose de estupor, reinará; y en reinando, descansará.
(Strom. V 14)
Orígenes (+ 253-254)
5. Y si alguien acepta el
Evangelio de los Hebreos, donde el Salvador en persona dice: Poco ha me tomó mi
madre, el Espíritu Santo, por uno de mis cabellos y me llevó al monte sublime
del Tabor, se quedará perplejo al considerar cómo puede ser madre de Cristo el
Espíritu Santo, engendrado por el Verbo. Pero tampoco esto le es a éste difícil
de explicar. (In Io. 2,6)
6. Si alguien admite el: Ha poco
me tomó mi madre, el Espíritu Santo, y me llevó al monte sublime del Tabor y lo
que sigue, puede, viendo en Él a su madre, decir… (Hom. in Ier. 15,4)
Eusebio de Cesarea (+ 339)
7. Ya algunos han querido incluir
entre estos escritos [cuya canonicidad se discute] el Evangelio según los
Hebreos, que es el mayor encanto de los judíos que han recibido a Cristo.
(Hist. Eccl. III 25)
8. Éstos [los ebionitas] pensaban
que debían ser rechazadas todas las cartas del Apóstol, llamándole a éste
apóstata de la Ley; y utilizando solamente el llamado Evangelio según los
Hebreos, hacían poco caso de todos los demás. (Hist. Eccl. III 27)
9. Narra también [Papías] otra
historia contenida en el Evangelio según los Hebreos, referente a una mujer
acusada ante el Señor de muchos pecados. (Hist. Eccl. III 39)
10. [Hegesipo] habla algo del
Evangelio según los Hebreos y del siríaco, y particularmente del dialecto
hebreo, dando a entender que él había llegado a la fe gracias a los hebreos.
Recuerda asimismo otras cosas como si provinieran de la tradición judaica no
escrita. (Hist. Eccl. IV 22)
11. Puesto que el evangelio que
ha llegado hasta nosotros en caracteres hebreos no lanzaba la amenaza contra el
que escondió (el talento), sino contra el que vivió disolutamente —pues
distinguía tres siervos: uno que había consumido la hacienda de su señor con
meretrices y flautistas; otro que había hecho rendir mucho su trabajo, y otro,
finalmente, que había ocultado el talento. Y dijo que el primero fuera
recibido; que el segundo, tan sólo amonestado, y que al tercero le metieran en
la cárcel—, se me ocurre preguntar si por ventura en el Evangelio de San Mateo
la amenaza que viene después de la reprimenda contra el indolente va dirigida,
no ya contra éste, sino (por epanálepsis) contra el anterior, que había comido
y bebido con los borrachos. (Theophania IV 22)
12. Él dio a conocer [ya] la
causa de la escisión de las almas, cual ha de sobrevenir a los edificios, como
hemos podido comprobarlo en un lugar del evangelio que está divulgado entre los
judíos, en lengua hebrea, donde se dice: Yo he de escogerme los que me
complazcan; [y éstos son] los que me da mi padre en el cielo. (Theoph.
[siríaca] IV 12)
13…. así es posible reconocer la
fuerza de que se sirvió [y constatar] que no sólo predijo el futuro, sino que
además vinculó los hechos a su palabra; sobre todo en lo que se refiere a
aquello que está escrito: Yo me escojo los mejores, los que me da mi padre en
el cielo. (Theoph., ibid.)
San Epifanio (+ 403)
14. Está en poder de [los
nazarenos] el Evangelio según San Mateo, completísimo, y en hebreo. Pues entre
ellos se conserva, sin duda, todavía éste tal como fue compuesto
originariamente, en caracteres hebreos. Lo que no sé es si han suprimido las
genealogías desde Abrahán hasta Cristo. (Haeres. l.I t.2 d.29,9)
San Jerónimo (+ 419 o 420)
15. Como podemos también leer en
el Evangelio Hebreo, [donde] el Señor habla a los discípulos diciéndoles: Nunca
estéis contentos sino cuando miréis a vuestro hermano con amor. (Comm. III in
Eph. 5,4)
16. … Pero quien leyere el Cantar
de los Cantares y entendiere que el esposo del alma es el Verbo de Dios, y
diere crédito al evangelio publicado [bajo el título] según los Hebreos, que
recientemente hemos traducido —en el que, refiriéndose a la persona del
Salvador, se dice: Hace poco me tomó mi madre, el Espíritu Santo, por uno de
mis cabellos—, no tendrá reparo en decir que el Verbo de Dios procede del
Espíritu, y que, por tanto, el alma, que es esposa del Verbo, tiene por suegra
al Espíritu Santo, cuyo nombre entre los hebreos es de género femenino, RUAH.
(Comm. II in Mich. 7,6)
17. También el evangelio llamado
según los Hebreos, traducido recientemente por mí al griego y al latín, del que
Orígenes se sirve con frecuencia, después de la resurrección refiere los
siguiente: Mas el Señor, después de haber dado la sábana al criado del
sacerdote, se fue hacia Santiago y se le apareció. (Pues es de saber que éste
había hecho voto de no comer pan desde aquella hora en que bebió el cáliz del
Señor hasta tanto que le fuera dado verle resucitado de entre los muertos). Y
poco después: Traed, dijo el Señor, la mesa y el pan. Y a continuación se
añade: Tomó un poco de pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio a Santiago el
Justo, diciéndole: hermano mío, come tu pan, porque el Hijo del hombre ha
resucitado de entre los muertos. (De viris ill. 2)
18. Aun el texto mismo hebreo se
conserva hasta hoy en la biblioteca de Cesarea, que el mártir Pánfilo formó con
muchísimo empeño. También a mí, los nazarenos que viven en Berea (Alepo),
ciudad de Siria, y que se sirven de este libro, me proporcionaron ocasión de
copiarlo. En el cual es de notar que, siempre que el evangelista, ya por cuenta
propia, ya poniéndolo en boca del Salvador, aduce testimonios del Antiguo
Testamento, no sigue la interpretación de los 70, sino la antigua hebraica.
Entre los cuales están aquellos dos: De Egipto llamé a mi Hijo y será llamado
Nazareno. (De viris ill. 3)
19. Ignacio … escribió … a los de
Esmirna y a Policarpo en particular. En esta carta se aduce un testimonio
acerca de la persona de Cristo, sacado del evangelio recientemente traducido
por mí, en estos términos: Yo a mi vez pude verle e su propia carne después de
la resurrección, y estoy convencido de que vive. Y cuando se dirigió a Pedro y
a los que con él estaban, les dijo: Palpad y ved que no soy un fantasma sin
cuerpo. Y al momento le tocaron y creyeron. (De viris ill. 16)
20. En Belén de Judea: Es éste un
error de los copistas, pues creemos que el evangelista dijo, como leemos en el
texto hebreo, de Judá, y no de Judea. (Comm. I in Mt. 2,5)
21. En el evangelio llamado según
los Hebreos se encuentra mahar, que quiere decir de mañana, en lugar de
sobresustancial; de manera que el sentido resulta así: Danos hoy el pan de
mañana, esto es, el del futuro. (Comm. I in Mt. 6,11)
22. En el evangelio hebreo según
San Mateo se dice: Danos hoy el pan de mañana, esto es, danos hoy el pan que
vas a darnos en tu reino. (Tract. in Ps. 135)
23. En el evangelio usado por
nazarenos y ebionitas (que recientemente hemos traducido del hebreo al griego y
que la mayoría llaman el auténtico de San Mateo), este hombre que tiene la mano
seca, se dice ser un albañil, y se le describe pidiendo socorro con estas
exclamaciones: Era albañil y me ganaba el sustento con mis manos; te ruego ¡oh
Jesús!, que me devuelvas la salud para no verme obligado a mendigar
vergonzosamente mi sustento. (Comm. I in Mt. 12,13)
24. En el evangelio que usan los
nazarenos encontramos escrito, en lugar de hijo de Baraquías, hijo de Joyada.
(Comm. IV in Mt. 23,35)
25. Éste (Barrabás), que había
sido condenado por rebelión y homicidio, se interpreta hijo de su maestro en el
evangelio llamado según los Hebreos. (Comm. IV in Mt. 27,16)
26. En (ese) evangelio, que
repetidas veces hemos mencionado, leemos que el arquitrabe del templo, de
tamaño extraordinario, se rompió y se partió. (Comm. IV in Mt. 27,51)
27. Y en el evangelio escrito con
caracteres hebreos leemos, que no se rasgó el velo del templo, sino que se vino
abajo el arquitrabe del citado templo, cuya magnitud causaba admiración. (Ep.
120,8 ad Hedybiam)
28. Mas según el evangelio
escrito en lengua hebrea, leído por los nazarenos, descenderá sobre él toda la
fuente del Espíritu Santo. El Señor es espíritu; y donde el espíritu del Señor,
allí está la libertad… Y a propósito, en el evangelio del que hace poco hicimos
mención, encontramos escrito: Y sucedió que, cuando hubo subido el Señor del
agua, descendió toda la fuente del Espíritu Santo, descansó sobre Él, y le
dijo: Hijo mío, a través de todos los profetas te estaba esperando para que vinieras
y pudiera descansar en ti. Pues tú eres mi descanso, mi Hijo primogénito, que
reinas por siempre. (Comm. IV in Is. 11,2)
29. Pues como los apóstoles le
tuvieran por un espíritu, o como dice el evangelio que entre los hebreos leen
los nazarenos, por un fantasma sin cuerpo… (Comm. in Is. 18 praef.)
30. Y en el evangelio que
acostumbraron a leer los nazarenos, según los Hebreos, se cuenta entre los
crímenes mayores el haber causado tristeza al alma de su hermano. (Comm. IV in
Ez. 18,7)
31. En el Evangelio según los
Hebreos, que fue escrito en lengua caldea y siríaca, mas con caracteres
hebreos, del que se sirven hasta hoy los nazarenos, según los apóstoles, o,
como prefiere la mayor parte, según San Mateo, conservado en la biblioteca de
Cesárea, se cuenta esta historia: He aquí que la madre del Señor y sus hermanos
le decían: Juan el bautista bautiza en remisión de los pecados; vayamos
(también nosotros) y seamos bautizados por Él. Mas Él les dijo: ¿Qué pecados he
cometido yo para que tenga que ir y ser bautizado? De no ser que esto que acabo
de decir sea una ignorancia mía. (Contra Pelag. III 2)
32. Y en el mismo libro
[Evangelio según los Hebreos]: Si pecare, dice, tu hermano de palabra y te
diere satisfacción, recíbele siete veces al día. Díjole Simón, su discípulo:
¿Siete veces al día? Respondió el Señor y le dijo: Te digo que sí, y aun
setenta veces siete. Puesto que aun en los mismos profetas, después de haber
sido ungidos por el Espíritu Santo, se han encontrado faltas. (Contra Pelag.
III 2)
Ps. Orígenes Latino
33. Está escrito en cierto
evangelio, llamado según los Hebreos (si es que place admitirlo, no como
autoridad, sino para esclarecimiento de la cuestión propuesta): Díjole el otro
de los ricos: ¿Qué de bueno tengo que hacer para poder vivir? Díjole: Cumple la
ley y los profetas. Respondiole: Ya lo vengo haciendo. Díjole: Ve, vende todo
lo que es tuyo, distribúyeselo entre los pobres, y vente, sígueme. Mas el rico
empezó a rascarse la cabeza, y no le agradó (el consejo). Díjole el Señor:
¿Cómo te atreves a decir: He observado la Ley y los Profetas? Puesto que está
escrito en la Ley: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Y he aquí que muchos
hermanos tuyos, hijos de Abrahán, están vestidos de basura y muriéndose de
hambre, mientras que mi casa está llena de bienes abundantes, sin que salga
nada de ella. Y volviéndose, dijo a Simón, su discípulo, que estaba sentado a
su lado: Simón, hijo de Juan, es más fácil que un camello entre por el ojo de
una aguja que un rico en el cielo. (Comm. in Mt. 15,14)
Ps. Cipriano
34. Y el inventor de este
bautismo adulterino, o mejor, mortífero, si algún otro es, sobre todo … aquel
libro supositicio titulado Predicación de Pablo. En el cual podrás encontrar,
contra el testimonio de todas las escrituras, a Cristo confesando su propio
pecado (Él, que fue el único que no pecó lo más mínimo), e impelido, casi
contra su voluntad, por María, su madre, a recibir el bautismo de Juan. Y que,
mientras era bautizado, se vio fuego sobre el agua, cosa que no figura en
evangelio alguno. Y que Pedro y Pablo, después de tanto tiempo, después de
consignar el evangelio en Jerusalén y de cambiar impresiones, y después de la
discusión y disposición de lo que había de hacerse, por fin [vinieron a verse]
en Roma, como si entonces precisamente se conocieran por vez primera. Y otras
cosas parecidas, inventadas absurda y torpemente, encontrarás reunidas en aquel
libro. (De rebaptism. c.17)
Teodoreto Cirense (+ h.460)
35. Los nazarenos admiten
solamente el Evangelio de los Hebreos, y llaman apóstata al Apóstol. (Haeret.
Fabul. Comp. II 1)
36. [Los nazarenos] han utilizado
únicamente el Evangelio según San Mateo. (ibid.)
37. Los nazarenos son judíos que
honran a Cristo como hombre justo y usan el evangelio llamado según San Pedro.
(ibid.)
Felipe de Side (+ h.430)
38. [Los antiguos] rechazaban de
plano el Evangelio según los Hebreos y el llamado de Pedro y el de Tomás,
diciendo que eran escritos heréticos. (Extractos, cit. por Lagrange)
Stichometria (s.IV)
39. Cuarto Evangelio según los
Hebreos: 2200 líneas. (añadida a la Chronographia de Nicéforo h.850)
Haymon de Auxerre (+ h.850)
40. Como se dice en el Evangelio
de los Nazarenos, que, al oír esta voz del Señor: [Padre, perdónalos], muchos
miles de judíos que estaban en torno a la cruz, creyeron. (Comm. II in Is., 53)
Versión copta de San Cirilo de
Jerusalén
41. Está escrito en [el
evangelio] según los Hebreos que, deseando Cristo venir a la tierra para
efectuar la redención, el Buen Padre llamó a una fuerza celestial por nombre
Miguel, recomendándole el Cuidado de Cristo en esta empresa. Y vino la fuerza
al mundo, y se llamaba María, y (Cristo) estuvo siete meses en su seno. Después
le dio a luz, y creció en estatura y escogió a los apóstoles … fue crucificado
y asumido por el Padre. —Cirilo le dice: ¿En qué lugar de los cuatro Evangelios
se dice que la santa Virgen María, madre de Dios, es una fuerza? —El monje
responde: En el Evangelio de los Hebreos. —¿Entonces, dice Cirilo, son cinco
los Evangelios? ¿Cuál es el quinto? —El monje responde: Es el Evangelio que fue
escrito para los Hebreos. … Cuando ellos le pusieron en cruz, el padre le
asumió hacia sí en los cielos. (fragmento copto publicado por V. Burch)
(Añadiduras a códices cursivos
griegos de San Mateo)
Glosas que reproducen el
IOUDAIKON
42. El Judaico no dice en la
ciudad santa, sino en Jerusalén. (In Mt. 4,5: cod. 566 Tisch.)
43. Bariona]: El Judaico: hijo de
Juan. (In Mt. 16,17: cod. 566; d 30; e 77)
44. El Judaico dice así después
de setenta veces siete: Pues también en los profetas, después de haber sido
ungidos con el espíritu Santo, se encuentra pecado. (cod 566; e 77 175; In Mt.
18,22)
45. El Judaico: y negó y juró y
echó maldiciones. (In Mt. 27,65: cod. 566; d 30; e 77 175 370 371)
46. La palabra eikh no aparece en
ciertos ejemplares (códices), ni en el Judaico. (In Mt. 5,22: cod. d 30)
47. El Judaico en este punto dice
así: Si estáis en mi regazo y no hacéis la voluntad de mi Padre, que está en
los cielos, yo os arrojaré de mi seno. (In Mt. 7,5: cod. d 30)
48. El Judaico: más [prudentes]
que las serpientes. (In Mt. 10,16)
49. El Judaico dice: es saqueado.
(In Mt. 11,12: cod. d 30)
50. El Judaico: te doy gracias.
(In Mt. 11,25: cod. d 30)
51. El Judaico no dice: tres
[días y tres noches]. (In Mt. 12,40: cod. e 175)
52. El Judaico: el Korbán, en el
que vosotros saldréis beneficiados por nosotros. (In Mt. 15,1: cod. d 30)
53. Lo señalado con asterisco no
está en los otros, sino en el Judaico. (In Mt. 16,2s.: cod. d 30)
54. El Judaico: Y les puso a su
disposición gente armada que se pusiera al frente de la gruta y le hiciera
guardia de día y de noche. (In Mt. 27,65: cod. d 30)